miércoles, 10 de diciembre de 2008

Top 3: Los mejores cortes de peluca catárticos

Empezamos con mi nueva serie fetiche, Battlestar Galactica: Las traumáticas experiencias que sufrió Starbuck en Nueva Caprica, le dejaron, como es lógico una importante huella. Al mismo tiempo, durante su estancia en ese planeta, su masculino corte de pelo se convirtió en una larga melena que, en mi opinión, le favorecía bastante. Pero para ella era imposible disociar una cosa de la otra, así que intentó librarse de sus traumas a golpe de cuchillo.

En la vida real, las extensiones de quita y pon que llevaba Katee Sackhoff, resultaban demasiado evidentes sobretodo cuando se la veía de espaldas (la segunda foto de abajo), aunque insisto en que realmente le sentaban bien.

Este caso es totalmente derivado de la trama, los guionistas decidieron “hacer crecer” el pelo de Starbuck, para más tarde cortarlo. Vamos con dos casos en los que fue la realidad la que intervino en la ficción:

La quinta temporada de Nikita fue algo que ni los guionistas se esperaban. Los fans, descontentos con el final supuestamente definitivo de la serie, que dejaba la relación de Michael y Nikita en un punto de difícil solución, hicieron todo lo posible por conseguir un final menos amargo. Efectivamente lo obtuvieron en forma de una mini-temporada de 8 episodios, que funcionaría de epílogo a la serie original. (1)

Volviendo al tema, Peta Wilson (Nikita) decidió cortar su melena tras el fin de la cuarta temporada, ya que como decíamos, no esperaba volver a encarnar al personaje. Lo cierto es que entre las temporadas cuatro y cinco, se daba un salto en el tiempo indeterminado, por lo que un corte de pelo de la protagonista no sería chocante, aún así, siguiendo con la estética noventera de la serie, se decidió mostrar a la propia Nikita cortándoselo, coincidiendo con el momento en el que por fin abandona la Sección 1 para pasar a trabajar en El Centro. Esta escena funcionaría como nexo explicativo antes de avanzar en el tiempo.

Por supuesto, tuvieron que recurrir a una inevitable peluca, que, aunque al principio del episodio quedaba bien disimulada por un sombrero, no pasó la prueba en la tópica escena ante el espejo, en la que por cierto, Nikita hace gala de una maña insólita, casi exagerada.En cualquier caso, creo que el nuevo look encaja a la perfección con las tramas de la quinta temporada en las que su rango dentro de la organización es mucho mayor.

Por supuesto, Buffy no podia faltar. El viaje de ida y vuelta a la tumba, la convirtió en una persona absolutamente desorientada e infeliz. Una de las consecuencias directas fue su irremediable atracción por “el lado salvaje de la vida” o lo que es lo mismo: Spike. Por supuesto ella se empeñaba en negar (incluso a sí misma) su obsesión por el vampiro, por lo que cuando este la llamó “ricitos de oro”, no dudó en seguir la larga tradición de cortes de pelo catárticos.

De nuevo en la vida real, Sarah Michelle Gellar, comentó a los guionistas su intención de cortarse el pelo, por lo que decidieron convertirlo en una escena clave del episodio. Lo que no acabo de entender es por qué no se cortó su propio pelo “en directo”, en lugar de hacerlo con esa peluca tan poco creíble. Supongo que, simplemente, la actriz no querría arriesgarse a cortar sus “ricitos” más de la cuenta.

En cualquier caso, la afición de los guionistas de esta serie por la iconoclastia y la autoparodia, les lleva a colocar a Buffy, justo después, en un salón de belleza intentando remediar el destrozo que se había hecho. Y es que no todas tienen la destreza de Nikita.

Pido disculpas por no contar a Felicity, seguramente el corte de pelo televisivo más impactante, pero mi conocimiento de la serie va poco más allá de esa referencia que hizo una vez Finch en Dame un respiro: “Voy a volver a la universidad, y pienso hacer todo lo que hizo Felicity… excepto cortarme el pelo”.

(1)Los fans de Nikita emplearon acciones como enviar gafas de sol (uno de los iconos del programa) a la cadena, y consiguieron esta temporada extra que no daba un final feliz tal y como ellos querían, pero sí uno más abierto a un posible futuro de felicidad y un montón de respuestas a preguntas formuladas a lo largo de los cuatro años de serie. Algunas de la magnitud de “VATOS, uno de nuestros programas más avanzados predijo una época de caos… en la que la Sección se derrumbaba frente a un enemigo poderoso. Y también predijo la llegada de una especie de mesías, alguien extraordinario que le pondría fin: Tú, Nikita.” La eterna pregunta de la protagonista “¿Por qué me trajeron a la Sección 1?” se respondía con una profecía… Los puntos serie B de Nikita son innegables.
Otras series que salvaron los fans (o que lo intentaron) en este artículo de Crítico en serie.

Capturas: Battlestar Galactica 3x06 “Torn”, La Femme Nikita 5x01 “Déjà vu all over again”, Buffy the Vampire Slayer 6x11 “Gone”.

domingo, 31 de agosto de 2008

Cabeceras ...3

En los anteriores artículos dedicados a cabeceras (este y este) nos planteábamos cuál es el verdadero objetivo de las mismas: ¿presentar a los personajes? ¿A los actores? ¿Servir como una especie de merchandising icónico? Al margen de todas estas posibilidades, una de sus funciones innegables es establecer una especie de contrato tácito entre los espectadores y los propios personajes. Veamos: Si el personaje “A” decía que debía irse a un país remoto y se despedía del resto de los protagonistas en el capítulo 15, esperábamos al 16 para comprobar si salía en la cabecera, y sólo en el caso de que no fuera así, sabríamos que los guionistas no nos habían engañado, y que si aparecía con normalidad, seguramente acabaría por volver al cabo de un par de episodios.

Ahora, con la nueva moda de las no-cabeceras, hay quien opina que al no existir esta “confirmación oficial” se gana en intriga en este aspecto. En general estoy de acuerdo con esta afirmación, aunque el problema de series como por ejemplo Lost es que aunque no dispongan de cabecera, siguen acreditando religiosamente a sus protagonistas justo después de la misma, y eso conllevaba que en la cuarta temporada, por ejemplo, mientras todos los losties preguntaban insistentemente a Ben “quién es tu espía en el carguero?”, ese misterioso espía llevaba varias semanas con su nombre en pantalla al comienzo del capítulo. Es obvio que la mayoría de los espectadores no conocen los nombres de todos los actores, pero muchos otros sí, y la sorpresa fue inexistente para ellos.

Volviendo a las cabeceras de toda la vida, hay casos curiosos como el del personaje de Tara (Amber Benson) en Buffy, Cazavampiros, al que le costó tres temporadas un puesto en la cabecera a pesar de poseer un peso en la trama tan importante como el de muchos de sus compañeros, llegando a tener capítulos dedicados a su personaje. Nunca hubo explicación oficial para esto, aunque había quien apuntaba a su homosexualidad como posible causa.

Pero su ausencia en la intro la convertía, inexplicablemente, en un personaje mucho más interesante: ¿Por qué no salía en la cabecera? ¿Estaba su personaje condenado a morir en cualquier momento? ¿La descubriríamos como el big bad la próxima semana?

El caso es que finalmente abandonó la serie durante varios capítulos. Por supuesto nadie tenía derecho a indignarse. “Si no aparece en los créditos iniciales, no hay contrato, nadie nos había prometido a Tara” por así decirlo… Pero un buen día volvió (6x19 Seeing red) y todos tan contentos, y más al descubrir que, al capítulo siguiente, su rostro conseguía un hueco en la cabecera. Tara era un personaje más, uno con el que podíamos contar.

A menos, por supuesto, que en ese mismo episodio, recibiera una bala perdida y muriera. De hecho, esto fue lo que ocurrió.


Joss Whedon nos había engañado. Sabía que había gente como nosotros, comprobando la cabecera capítulo a capítulo y por ello decidió plantearnos una pregunta: “¿Creéis que por el simple hecho de que escribamos el nombre de su intérprete en la intro, Tara llevará un chaleco antibalas?”

Lo de Tara al menos sirvió para un experimento paratextual, si bien es cierto que muchos no lo vieron con buenos ojos y lo interpretaron como una burla por parte de Whedon (acusado de mantener el cliché hollywoodiense de la “lesbiana muerta o malvada”)(*), pero casos como el de Kim Kelly (interpretada por Busy Phillips) en Freaks and Geeks me parecen prácticamente denunciables.

En esta serie (a la que dedicábamos Cabeceras …2) hicieron la cabecera para el capítulo piloto y en él, Kim (la rubia de la foto de arriba) aparecía como una secundaria abusona del instituto. El segundo capítulo, introdujo algunos cambios con respecto al piloto, como por ejemplo, un protagonismo mucho mayor para este personaje, equiparándolo al resto de los freaks y de los geeks del reparto. Pero en lugar de rehacer la cabecera que se había preparado para el capítulo 1, o simplemente introducir un par de planos del personaje, los productores se limitaron a acreditarla, tras la intro, como “also starring” (“también protagonizado por”), algo que no parecía muy lógico cuando la actriz incluso compartía imágenes promocionales con sus compañeros. Pero el problema es que dejaban al espectador con la sensación, puede que subliminal, de que Kim era poco menos que prescindible. Por suerte, capítulos como Kim Kelly is my friend (1x04) nos recordaban todo lo contrario.


(*)Os linkeo a una traducción del más que interesante artículo "The death of Tara, the fall of Willow an the dead/evil lesbian cliché"

Y aquí os dejo la cabecera en la que por fin sale Tara, eso sí, sus planos son estupendamente cutres, especialmente el último de ellos, el que comparte con Xander y Buffy, que además de larguísimo está fatalmente compuesto. Estoy seguro de que ese plano, en condiciones normales, jamás sería incluido en una cabecera.